Habitualmente no necesitamos utilizar todo el agua almacenada en nuestro inodoro. Elige cisternas equipadas con sistema de doble descarga que te permitan usar sólo la mitad de su capacidad y no gastar innecesariamente. Reserva los 4,5 o 6 litros del total del depósito para cuando sea necesaria una mayor capacidad de arrastre y prepárate para ahorrar mucho con un sencillísimo gesto.